Madres buscadoras que buscan a sus seres queridos en los campos de exterminio en Teuchitlán, Jalisco, han denunciado la alteración de la escena del crimen por parte del Gobierno de México. Según sus declaraciones, las autoridades permitieron el acceso a las fosas, pero solo de forma controlada, lo que les permitió notar que los terrenos habían sido limpiados y alterados.
Las mujeres, que han estado luchando por encontrar a sus familiares desaparecidos, aseguraron que las fosas ya no estaban en su estado original. "Nos dejaron pasar en línea recta, pero pudimos ver que las fosas ya estaban aplanadas", señalaron.
Este acto de alteración de evidencia ha causado gran indignación entre las madres y activistas, quienes exigen que el gobierno mexicano rinda cuentas por lo sucedido. Muchos se preguntan si esta intervención es parte de una estrategia para ocultar la magnitud de las desapariciones forzadas en la región.
Este acto es gravísimo y no podemos permitir que sigan alterando las pruebas. El gobierno es cómplice de lo sucedido en Teuchitlán, manifestaron las madres durante una rueda de prensa.
Las organizaciones de derechos humanos también han expresado su preocupación por las prácticas del gobierno en los terrenos de Teuchitlán, insistiendo en que se deben garantizar investigaciones imparciales y sin interferencias externas.
Noticias recientes de Estados Unidos, México, Colombia, Argentina, Latinoamérica y el mundo.