El Hospital Nacional Edgardo Rebagliati Martins vivió una jornada especialmente difícil este 24 de abril. Una mujer, cuya identidad no ha sido revelada, perdió la vida tras arrojarse desde el piso 14 del edificio principal.
El hecho causó un profundo impacto entre pacientes, personal médico y visitantes del hospital. Según testigos, la joven permanecía sentada en la cornisa, y aunque algunas personas notaron la situación, no hubo una intervención a tiempo para evitar el desenlace.
El hospital confirmó el fallecimiento a través de un comunicado oficial, donde también expresó sus condolencias y aseguró estar colaborando estrechamente con las autoridades para esclarecer lo ocurrido.
El levantamiento del cuerpo fue realizado por el Ministerio Público, mientras que el personal del centro de salud activó los protocolos correspondientes.
Este trágico evento ha reabierto la conversación pública sobre la importancia de la atención en salud mental, especialmente en espacios como hospitales, donde las emociones y tensiones pueden estar a flor de piel.
"Expresamos nuestras más sinceras condolencias a los familiares y seres queridos de la persona fallecida. Nos solidarizamos con su dolor en este difícil momento", expresó la institución médica.
El centro hospitalario también informó que por respeto a la privacidad de la víctima, no se ofrecerán mayores detalles sobre su identidad o circunstancias personales.
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