La cooperación internacional da frutos en la lucha contra el tráfico de armas. El embajador de Estados Unidos en México, Ronald Johnson, informó que el Departamento de Seguridad Nacional (HSI) en Laredo, Texas, desarticuló una red de contrabando de armas con la detención de dos individuos acusados de intentar introducir 400 armas de fuego a México. Entre el armamento asegurado se incluyen rifles de asalto, cargadores y municiones.
El operativo, que también involucró a la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP), se realizó en la frontera entre ambos países. La acción fue posible gracias a la colaboración entre agencias estadounidenses, lo que permitió la identificación de compartimentos ocultos en dos remolques. Según las autoridades, el destino final de las armas era el mercado negro mexicano, alimentando la violencia asociada a los cárteles.
"Armas que no llegarán a manos de criminales", expresó Ronald Johnson en su cuenta de X, destacando la importancia de este tipo de operativos conjuntos para garantizar la seguridad de ambos países. Los detenidos, un padre y su hijo, fueron arrestados bajo cargos de contrabando federal de armas de fuego y entregados a las autoridades para su proceso judicial.
La lucha contra el tráfico de armas sigue siendo una prioridad en la agenda de seguridad compartida entre México y Estados Unidos.
Imagen enviada por **Elena Gutiérrez** (lectora)
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